Que se jodan todos los que se rinden, los que no luchan, los que se paran, los que se rinden, los que tienen miedo de enfrentarse a lo que está pasando.
Que se jodan los que se quejan todo el tiempo, los pesimistas, los egoístas, los arribistas, los egocéntricos y los que huyen del cansancio.
Que se jodan los que olvidan nuestro pasado.
Estoy releyendo el diario que mi abuelo Teudis escribió casi a mitad del siglo pasado cuando hacía era militar.
Era de Gamones de Sayago, un lugar muy humilde de la provincia de Zamora, donde vivían unas 90 personas. Hizo de militar para ayudar económicamente a su familia.
Quería ayudar. Lo hizo entonces y también el resto de su vida.
Estuvo casado con mi iaia Antonia toda su vida. ¡Qué mujer era la iaia Antonia!
Mi abuelo materno, el avi Ton, vivió en la misma época en el lado políticamente opuesto. Era de Sant Hilari Sacalm, un pueblo en medio de las montañas de Cataluña. Allí hacía un frío que no podemos ni imaginar, la vida en el bosque era dura, y en aquella época los sacrificios estaban presentes en todos los hogares.
Mi abuelo era agricultor. Lo fue toda su vida.
Su mujer era mi Iaia Roser, que en Navidad nos compraba croissants con nata y Fanta en la botella de cristal. Para ella era un lujo ponerlos en la mesa. Yo siempre lo aprecié.
El mundo no era como el nuestro.
Nuestros abuelos pasaron hambre.
Nuestros abuelos vivieron cosas que nosotros no podemos ni imaginar.
En todas las familias era así.
El abuelo de mi amigo pasó ocho años en una "prisión" en la India, otro acabó haciendo trabajos forzados en Berlín.
El bisabuelo de otro amigo se escondió en un pozo para evitar ser capturado por la facción contraria.
No tenemos ni idea de lo que tuvieron que superar para sobrevivir.
Todos ellos, sin excepción.
Y aquí, en 2023, escuchamos quejas todo el tiempo....
La profesora le puso una nota injusta a mi hija. Le ha cogido manía.
¿Me comprarás el último abrigo de diseño, que está de moda?
Estoy ansioso. No consigo wifi.
Tío, he escrito un whatsapp y no contestan.
¿Me compras las últimas Nike Air de 250 euros?
Hace tiempo que no salgo a cenar.
¿Qué quieres cenar hijo mío? (da igual que tenga 30 años, nunca haya trabajado y siga viviendo en casa arropado por su madre).
Buen partido estrella. Dame la bolsa que yo te la llevo para que no te cueste.
Tengo el último móvil. Preferiría no comer, pero no puedo no tenerlo.
Amigos. Demos gracias por lo que tenemos. Somos afortunados.
Hasta "anteayer" se tuvo que luchar mucho para sobrevivir.
No es fácil vivir en nuestros tiempos. Soy consciente de ello. Es duro. También lo es para mí.
Pero amigos. A la mierda los que siempre se están quejando.
Sigamos adelante.
Disfrutemos de las cosas sencillas.
Busquemos las cosas genuinas.
Recordemos lo que nos enseñaron nuestros abuelos.
Y demos gracias.
Hola abuelo.
Soy su Pinchavuas.
No le veo desde hace muchisimos años pero pienso muy a menudo en usted.
Le hecho de menos.
Gracias por todo.
