Amigos

¿Qué son los amigos? Son los que te hacen compañía en tu viaje.

Ellos son los que te sostienen cuando todos están huyendo. Son aquellos que te aman por lo que eres y no por lo que los demás quieren que seas. He dejado conscientemente a mucha gente en mi camino. Y ciertamente mucha gente me ha dejado a mi.

Algunos de mis amigos lo son desde hace muchos años. Y tengo amigos muy recientes.

Tengo amigos por los que daría mi propia vida.

Con el tiempo, he tenido algunas agradables e inesperadas sorpresas de ellos.

Gestos de los que te hacen salir las lágrimas y la emoción.

- Tengo amigos que una vez fueron parientes. Luego se convirtieron en ex parientes. Y que ahora son prácticamente mi hermano y mi hermana. - Amigos que estaban allí cuando yo estaba en el fondo del pozo. - Amigos que me oyeron llorar y con los que ahora bebo buen vino, salimos juntos en bici y hablamos de todo con una gran sonrisa en la cara.

- Amigos encontrados después de 25 años y que han dado un nuevo y hermoso sabor a la vida. - Amigos que no oigo mucho. Pero por quién iría a cualquier lugar de rodillas si me lo pidieran.

Amigos que te hacen galletas a mitad de la semana porque saben que así las pueden comer los tres rayos del sol porque no estarán contigo el fin de semana. Y no. Eso no es ser stalker. Es amar a través de un simple gesto.

Amigos: Son ellos, junto con mis hijos y mi familia cercana, para los que vale la pena vivir. Los amigos son aquellos que sabes que están ahí. Y saben que estás ahí. Los amigos te dan la mano, te abrazan y te aman. En tiempos de gran necesidad. Pero también con pequeños gestos que pueden parecer insignificantes. Los amigos pueden ofrecerte un sofá y una manta cuando lo necesites. O pueden darte un buen cava porque saben que amas esa "tal marca". Amigos. Como los de un maravilloso video chat que hice anoche.

O amigos que, como en estos días, pueden darte una idea, sin saberlo, cuando estás atascado en un trabajo.

"Ooh, tengo un trabajo a medio hacer desde hace mucho tiempo. Compré el material hace casi un año. ¡¡Vamos, Teudis, tienes que terminarlo!! ¡Continúa con ello! ¡Tienes que encontrar una solución para el engranaje de apertura!" Y envio un mensaje de texto: "Angelo, estoy bloqueado. Tengo esta idea, pero no encuentro la solución. ¡Sé que eres mi hombre!" "Entiendo, Teudis. Te enviaré algunos dibujos ahora mismo. Una vez usé un palo de escoba para algo como esto".

¡Maldita sea! Un palo de escoba. Lo probé con bisagras de tazón, muelles de gas y bisagras tradicionales. Nada me convenció. Angelo me desbloqueó. Un simple palo de escoba. Claro que sì!

Y entonces todo cogió su forma. De una manera natural, simple y lineal. Corté, construí.

Y hoy he intentado colgar el mueble nuevo. Per hacerlo solo era imposible.

Lo intenté. Pero casi me disloco el hombro.

Amigos:

"Ale", tan pronto como termines de comer, ¿vienes un momento? ¿Necesito una mano?" "Claro, dame 10 minutos y allí estaré".

Amigos. Qué cosa tan maravillosa.

Este confinamiento nos ha ayudado a entender muchas cosas.

Amigos. - Es maravilloso tenerlos en mente. - Es maravilloso que te tengan en mente. - Vale la pena vivir por ellos.

Y de todos modos, gracias a los amigos, ahora puedo comer en el balcón con mis tres queridos rayos de sol. O quien quiera venir.

Tengo solo que arreglar algun trocito i pintar el mueble de color blanco. Come el que hice el año pasado.

Amigos.

No hace falta tener muchos.

Los más importante es que sean verdaderos.